La camisa es una
prenda que parece muy fácil de escoger, pero tiene varios elementos que debés
analizar antes de invertir en la más adecuada para proyectar lo que tenés por
objetivo. Uno de estos elementos es el puño:
Existen diferentes
tipos de puños; fijate en los cortes que tiene y elegí según tu estilo:
El Puño más habitual
es el simple y lo podés encontrar en distintas opciones. En corte recto puede
tener hasta tres botones, apegado al estilo inglés. El redondo te proyectará
con un estilo más cercano mientras que que el puño simple de corte sesgado, te proyectará
como más sofisticado. Éste último es el más común en una de las mejores confecciones:
la italiana.
El puño francés o doble,
es ideal para vestir en eventos formales y alta etiqueta. Cabe destacar que también
se puede llevar en días cotidianos, aunque siempre con saco y corbata. El
francés es más ancho que los anteriores, y está especialmente diseñado para
llevar con gemelos o mancuernillas. Lo podés encontrar también con cortes
redondo, sesgado y recto.
El más funcional es el
puño mixto o combinado, que puede usarse con botón, quedando como de estilo
simple, y con mancuernillas en caso de así desearlo, gracias a que cuenta con
dos ojales.
Los hay con color de
contraste para voltearlos y que quede a la vista su diseño. Éstos los
encontrarás en camisas informales y casuales.
El puño debe quedar
con espacio de un dedo entre éste y la muñeca y su largo debe ser justo sobre
el hueso que sobresale por encima de la muñeca. Recordá que el puño siempre
deberá sobre salir 1 cm por debajo del blazer o saco que acompañe el traje.
Marianela Lacayo