lunes, 28 de noviembre de 2011

¿Qué vestir los Casual Fridays?



Encontrarse un viernes con ejecutivos y colaboradores vestidos de traje y corbata es cada vez más extraño, debido a la implementación de los “casual fridays” o viernes casuales en las empresas.

Si perteneces a una empresa que permite dentro de su código de vestimenta el viernes casual, es elemental manejar el concepto para así no cometer errores en nuestra presentación.

El objetivo del viernes casual es que el personal se sienta más relajado y cómodo, lo que no quiere decir informal, desarreglado o todo lo contrario, vestidos a la última como modelos de pasarela mostrando las tendencias y modas que no concuerdan con el entorno laboral.

Existen muchas teorías sobre el origen de esta cultura empresarial, pero la mejor sustentada la ubica en California durante la explosión de las empresas “puntocom” de finales de los noventa. Conocidas empresas “puntocom” fueron Yahoo, Netscape, Amazon, Google o Ebay, dirigidas por jóvenes empresarios que huían de los convencionalismos de la vestimenta ejecutiva. Cuando la burbuja “puntocom” reventó, más de 5,000 de estas empresas quebraron y las que sobrevivieron fueron poco a poco amoldándose al sistema empresarial tradicional.

Sin embargo una de las herencias del “Management Puntocom” es que la empresa tradicional, para ofrecer mayor libertad a sus colaboradores, implementó un día de vestimenta menos formal. Además se descubrió que la implementación del viernes casual significaba un gran ahorro energético, al poder trabajar los colaboradores con temperaturas de dos a cinco grados centígrados más altas sin problemas y ahorrando miles de dólares anuales en aire acondicionado a las corporaciones.

Interesante es conocer que esta opción de viernes casual también ha presentado problemas a algunas empresas donde los clientes que llegan y van vestidos de traje se sienten incómodos por lo que las empresas han tenido que colocar en la entrada avisos disculpándose por su forma de vestir.

Quizá lo más importante es saber qué evitar para no dar rango a la equivocación. A pesar de que es el día en que se dejan las corbatas, chaquetas y pantalones de vestir formales en casa, no podemos caer en el error de vestir como queramos.

En el caso de las mujeres que son las que más opciones tienen para escoger, deben olvidarse los zapatos, accesorios o complementos tipo fiesta, llamativos y de colores estridentes. Las telas transparentes que muestren mucha piel o ropa interior, muy ceñidas y estilos muy escotados quedan fuera de lugar, al igual que los colores y estampados dramáticos y llamativos.

En caso de los hombres, las camisetas, camisas muy ajustadas, estampados gráficos, colores que parezcan gastados y de telas deshilachadas, zapatillas y ropa de deporte de cualquier tipo deben ser evitados a toda costa.

En ambos casos no vestir jeans gastados, con hoyos, telas deshilachadas, tachuelas, brillos, bordados, parches y muy ajustados.

Al identificar lo que no se debe usar será más fácil saber las opciones que hay en tu guardarropa para usar un viernes casual, y recuerda que independientemente de un viernes casual, es recomendable mantener una vestimenta formal cuando la situación lo requiera, sobre todo si ese día se realizarán reuniones importantes.

Lo ideal es que utilicen jeans azul marino de corte recto y talle según el tipo de cuerpo, tops estampados o de colores favorecedores combinados con blazers casuales. Los zapatos deben ser bajos tipo mocasín, bailarinas color neutro o sandalias de plataforma media.

En caso de los hombres, las camisetas, camisas muy ajustadas, estampados gráficos, colores que parezcan gastados, zapatillas y ropa de deporte de cualquier tipo deben ser evitados a toda costa.

Una sencilla opción es usar jeans azul marino de corte recto, ni holgado ni tallado, con camisa casual de botones y mangas largas y saco casual sin corbata. En caso de no necesitar la chaqueta puede ir con camisa mangas cortas con jeans o pantalón tipo “dockers” o chino, con zapatos mocasín. Siempre se debe vestir medias y cinturón de piel.

Marianela Lacayo

Moda y estilo: La gran batalla


Una de las frases más famosas que se le atribuyen a Coco Chanel es la que dice que las modas pasan y solo el estilo permanece, y es que existe una sutil diferencia entre estos dos conceptos tantas veces confundidos y mal interpretados.

La moda, por un lado, está íntimamente apegada a las costumbres adoptadas por grupos de personas que se sienten identificadas con una propuesta de diseño de ciertas prendas de vestir, mientras que el estilo tiene un componente basado en la personalidad de cada individuo que le confiere una identidad propia y diferente al resto.

Es por este motivo que debemos tener cuidado cuado se dice que alguien va o no a la moda o que comparten más o menos el mismo estilo en el vestir.

De lo que sí estoy segura es que ni las modas favorecen a todos por igual ni existen estilos estandarizados que se ajusten a la medida de cada persona.

Por eso, a pesar de que las tendencias y el pret-a-porte nos permiten adquirir casi cualquier prenda en nuestros días, debemos tener en cuenta algunos puntos para analizar, como la edad y estar conscientes de la forma que tiene nuestro cuerpo, esto nos evitará caer en el ridículo.

Conocernos nos ayudará a identificar aquello que nos combina y descartar lo que no nos queda bien aunque nos guste.

Nuestro estilo de vida, profesión, gustos y pasatiempos, entre otros, deben ser tomados en cuenta en la construcción de nuestro estilo, pues a través de él estaremos comunicando mucho de nuestra personalidad, cultura, educación y cambios de etapas en la vida.

Marianela Lacayo


Lánzate al Color Block


Sin duda la tendencia más marcada y predominante de 2011 ha sido el estilismo del “Color Block”.

A diferencia de algunas modas que desaparecen rápidamente de las vitrinas, existen otras que se implantan con firmeza, reinventándose a lo largo de los meses y manteniéndose por mucho más tiempo en la calle, y el mejor ejemplo es el “Color Block”.

También conocido como “Color Blocking” es la combinación de distintas prendas, que presenten diferentes colores, como formando bloques.

Los colores pueden ser brillantes o pasteles, opuestos o de gamas similares, llamativos o más discretos.

Una recomendación importante para seguir este estilo, es que las telas no pueden ser estampadas.

Hay quienes le huyen a este estilo, por su tendencia llamativa. Para ellos les propongo el uso de colores suaves y pasteles también en bloques, o combinando un solo color brillante y el resto suaves.

Asimismo se recomienda apoyarse en los accesorios que pueden ser los protagonistas del bloque de color y no la ropa.

Si se pregunta cómo llevarlo, la respuesta es sencilla: de modo minimalista al vestir, en bloques de colores suaves con los que te proyectarás sofisticada y distinta del resto.

Las mezclas para esta temporada son el burdeos con cualquier gama de azul. También el camel con rosados de suaves a brillantes, de igual manera el terracota con verde pino o gris con ciruela.

Cualquiera de estos bloques de colores pueden ser acompañados de un tercer color en los accesorios o complementos, como zapatos, carteras o cinturón .

No olvides llevar el color que más te favorezca cerca del rostro, aquel que resalte mejor las características de tu piel.

Marianela Lacayo








La corbata perfecta



A la hora de aportar estilo y elegancia a un atuendo, los complementos son de vital importancia. Y en el caso de los hombres, la corbata es tan importante para la camisa como lo es la camisa para el atuendo completo.

Sin embargo, debemos confesar que las opciones para ellos son mucho menores y por eso debemos aprender a sacarle el mayor partido posible a lo existente.

Si hay un complemento llamativo en la vestimenta formal masculina esa es la corbata. Por este motivo es elemental que se comprenda su uso en etiqueta y cómo combinarla correctamente con la camisa.

La regla básica es que cualquier tono de camisa siempre irá acompañado de una corbata de gama más oscura, como por ejemplo, camisa azul cielo con corbata color vino o verde oscuro.

Resulta clave el contraste entre el color de la camisa y el de la corbata, donde una de estas piezas debe ser más predominante que la otra, lo que queda a gusto de cada quien.

Atendiendo a la etiqueta, no es apropiado repetir los colores de la camisa en la corbata o llevar ambas en el mismo color.

Debemos evitar las camisas a rayas con corbatas que también las tengan, a menos que estas sean de un tamaño diferente. En este caso la corbata se verá mejor en color liso o de motivos diversos y respetando que la dimensión de estos sea la misma de las rayas de la camisa.

El cuadro muta de lo rural a lo urbano, de manera que una camisa de estampado a cuadros armoniza adecuadamente si se lleva con una corbata de dibujos discretos o tamaño similar a la proporción de los que luzca la camisa.

Los colores y diseños de los estampados, tanto en la corbata como en la camisa, siempre estarán ligados con el estilo personal de quien las vista, pero siempre es recomendable actualizarse cada año para no tener un modo monótono de vestir.

Marianela Lacayo