A pesar de que su uso
unisex es cada vez más común, el rosa ha sido un color tradicionalmente
estigmatizado por sus connotaciones femeninas.
Actualmente, la mujer
encuentra de una forma inteligente la manera de eliminar los paradigmas con
respecto a los colores “femeninos” y los vuelve a usar con total libertad y
empoderamiento, para reafirmar que ser femenina es una opción o una cuestión de
estilo, más no un elemento que determine, si por género, se es más o menos capaz,
y además lo comparte con el sexo opuesto
para que no quede duda de que es un color que luce maravillosamente a ambos.
En las vitrinas vas a
ser testigo del fenómeno del rosa salmón, un color de la familia de los cálidos
y de intensidad suave, muy elegante, sofisticado, que te permitirá proyectarte
como alguien minimalista e incluso retro si optás por prendas inspiradas en
modas románticas.
Con este color
parecerás una persona de carácter suave y tranquila, mediadora y cercana. Resulta
perfecto para balancear tonos muy oscuros durante el día, y creará un efecto
fresco y luminoso en cualquier momento si lo lucís cerca del rostro.
Tené en cuenta que no
es un color que luzca a todos por igual. Al ser cálido es recomendado para pieles
beige, doradas, bronceadas, muy claras, morenas doradas o marrones. Con
cabellos rubios platinados, dorados con iluminaciones claras, combinaciones
variadas de colores castaños o rubios suaves, e ideal en ojos de color claro
como verde, amarillo, pardo, aunque hay sus excepciones de otros tonos tanto en
piel, ojos y cabello.
Si le produce un efecto pálido o amarillo al rostro evitalo cerca del mismo, y lucilo en prendas alejadas de éste.
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