domingo, 26 de agosto de 2012

Código sport




Las últimas Olimpiadas han logrado posicionar el estilo deportivo como una tendencia más casual que informal, sobre todo dependiendo de cómo la llevés.

La clave está en combinar prendas casuales o más elegantes con otras de estilo sporty, como por ejemplo camisetas de algodón con grafismos o números, inspiradas en la numeración de equipos deportivos. Estas camisetas, preferiblemente holgadas, puedes llevarlas con faldas tipo lápiz, corte A, plisadas, faldones, palazzos, y por supuesto con jeans y leggins en todos sus estilos.

Las camisas de hombro metido, tirantes tipo traje de nadadora, vestidos y blusas con cortes asimétricos, cuellos halter, prendas ajustadas al cuerpo, zapatos deportivos tipo sneakers con plataforma, zapatos estilo bolero o golf, bi y tricolor, entre otros.

Algunos pantalones con características sporty se verán muy originales llevándolos con tacones. Es el caso de pantalones tipo mono de hacer ejercicio, con el clásico elástico en la cintura y cordón para sujetar, o el tipo leggin con líneas laterales en distinto color.

Asegurate de que la tela pueda ser stretch deluxe, viscosa, algodón fino y para la noche en seda, raso o satinados. Ganarás medalla de oro.

Si lo que te gusta es mostrar las piernas, escogé minivestidos, shorts y faldas tipo tenista en seda, viscosa, raso, algodón o lino, y complementalo con una gorra o visera transparente y acharolada.

Para finalizar no podía faltar un básico deportivo como las chaquetas de zipper y bolsillos, con y sin capucha, esta vez con estampados mezclados animal print, camuflaje y hasta flores.

Los colores que dan luz a esta tendencia son los neón y neutros y pasteles.

Por Marianela Lacayo


Ante el consumismo y la crisis, practica "dietashopping"


  • Distintas iniciativas demuestran que se puede sobrevivir sin comprar ropa
  • 'Realmente no es necesario comprar cosas nuevas constantemente'
  • La 'dietashopping' ayuda a incrementar la conciencia como consumidor


¿Es posible estar un año entero sin comprar ropa? Lo que para algunos es una pesadilla, para otros se ha convertido en un reto contra el consumo desenfrenado. Distintas iniciativas en todo el mundo pretenden demostrar que se puede sobrevivir sin comprar ropa y, además, estar a la moda.
Sarah Lazarovic, una periodista canadiense especialista en contenidos digitales, decidió embarcarse en su particular "dieta shopping" el 1 de enero de este año y no comprar ni una sola prenda de ropa.
Desde entonces no solo se siente mejor, sino que ha creado un diario visual en el que recoge con dibujos las prendas que hubiera comprado y las acompaña con reflexiones sobre el significado de consumir en una sociedad inmersa en una profunda crisis económica.
"Es necesario que pensemos en cómo y qué consumimos. Estamos en plena recesión económica, pero las marcas continúan diciendo que tenemos que comprar, comprar y comprar, y hacerlo a través de internet es muy fácil. Todo es muy contradictorio", señala Lazarovic.

'Tengo tanta ropa que ya no sé ni lo que tengo'

Escogió llevar a cabo esta iniciativa ante la evidencia de que estaba comprando demasiada "ropa-basura", que realmente no necesitaba y descubrió que la experiencia "no es tan dura como parece", además de lo "gratificante" de darse cuenta de que "realmente no es necesario comprar cosas nuevas constantemente". Otro de los beneficios de esta dieta es que "te obliga a ser creativo" con la ropa que tienes y además "ahorras dinero", añade.
Para la periodista, en esta 'dieta' todo son ventajas, ya que ayuda a las personas a incrementar su "conciencia como consumidor" en una época caracterizada por el abierto 24 horas y en el que comprar por internet es tan fácil "como respirar".
Esta experiencia es similar a "The Great American Apparel Diet", un proyecto que juega con el nombre de la más "indie" de las marcas de moda en Estados Unidos, y que propone a sus seguidores no comprar ninguna prenda durante 365 días a excepción de calzado, accesorios y ropa interior.
En su web los usuarios explican las motivaciones para llevarla a cabo, desde "tengo tanta ropa que ya no sé ni lo que tengo", pasando por gente que quiere dedicar el tiempo que emplea a compras en cosas que les hagan "realmente felices".
En similar dirección se mueve el proyecto "The six items challenge": los participantes escogen seis prendas de ropa, en el que no cuentan zapatos ni accesorios, y se comprometen a vestirse durante todo un mes únicamente con esa prendas.

La clave está en los complementos

El reducido número de prendas obliga a escogerlas con cuidado yderrochar toda la imaginación posible en la elección de los complementos, que se pueden utilizar tantos y tan variados como se quiera.
La mayoría de los participantes se sorprenden por los resultados: No solamente pueden conseguir cumplir el objetivo, sino que la mayoría de las personas que les rodea -familia y trabajo- no se dan cuenta de que repiten una y otra vez los mismos modelos.
La clave está en los complementos -zapatos, joyería, cinturones, pañuelos, bolsos- que pueden dar una apariencia totalmente distinta a las mismas prendas, según señalan algunos de sus participantes en la web.
Pero la mayor virtud de este tipo de iniciativas, es que se puede pasar del "no tengo nada que ponerme" a un armario repleto de posibilidades, sin gastar ni un euro.
Extraído de EFE